sábado, 7 de septiembre de 2019

Preparados, listos ...YA!

Vamos calentando motores ... ¡brmmm, brrrrmmm! Arranca el curso escolar.

Últimos preparativos y comenzamos con la rutina diaria.
¿RUTINA? Sí, los horarios marcan nuestros tiempos pero somos nosotros los que VIVIMOS cada momento de ese TIEMPO que , durante muchas horas, días, meses, años ... vamos a compartir en el cole.

Está en nuestras manos el tratar de conjugar los mejores elementos para que nuestros niños y niñas puedan desarrollar al máximo sus posibilidades, su talento, desde todos los ámbitos que van a forjar su personalidad: Inteligencia, creatividad, sensibilidad, habilidades sociales, empatía, asertividad, reconocimiento y respeto de los valores propios y de los demás, autonomía, autoconocimiento, responsabilidad, espíritu crítico, ganas de aprender, de convivir, de crecer...

Sí, asumimos el reto de educar a los más valioso de la sociedad - nuestros niños y niñas - el presente y el futuro. Y esta tarea necesita que juntos, familias y profesores, colaboremos, hablemos, intercambiemos información y apoyo, coordinemos estrategias y disfrutemos cada día.

Ellos, los niños y niñas,  son los más importantes, juegan el papel fundamental, son los protagonistas. Irán caminando con tropiezos, saltando charcos o metiéndose en ellos, a veces cogiendo carrerilla para subir las cuestas o velocidad en la carrera. Los adultos que los acompañamos podremos orientar, tratar de allanar el camino, y como somos más altos que ellos,  es fácil que podamos ver los obstáculos y anticiparnos a los problemas, estaremos muy atentos.

Y ese es el objetivo de la escuela, el APRENDIZAJE, sí, con letras mayúsculas.
El  tratamiento de los contenidos curriculares es fundamental, tanto como todo lo demás para una formación integral. Y como hablamos de niños de 3 a 12 años, el factor lúdico es también básico.

En este momento de planificación hay que tener en cuenta todo lo anterior para configurar ese "horario diario" de tiempo escolar y otras actividades complementarias.

Sabemos lo difícil que es conciliar la vida laboral y familiar, también queremos ofrecer las mejores oportunidades  nuestros hijos y, a veces ajustamos tanto el tiempo o queremos tener todo tan controlado que no dejamos margen para el juego espontáneo o para el aburrimiento que también son necesarios.

Reportaje ¡Mamá, quiero aburrirme!

Especial familias de 3 años. Vuelta al cole: cómo empezar bien el nuevo curso y no morir en el intento